El pollo es un alimento muy común en las comidas y cenas de muchas familias. Es una carne muy versátil, que admite un sinfín de elaboraciones, es económica y muy baja en calorías. Sin embargo, cocinar pollo y que quede perfecto, es decir, jugoso por dentro y dorado por fuera, tiene su truco.
¿Cuántas veces has hecho unas pechugas a la plancha y te han quedado como la suela de un zapato, pollo al horno seco y correoso o pollo frito crujiente por fuera y crudo por dentro? Si te has sentido identificado, ¡sigue leyendo! Vamos a darte algunos consejos para cocinar pollo y que el resultado sea digno de estrella Michelin.
- Límpialo con papel
El pollo no debe lavarse antes de cocinarlo. Para limpiarlo, utiliza papel de cocina para eliminar el exceso de líquido que pueda tener. El resultado será una carne bien crujiente y un interior jugoso.
- Sácalo de la nevera unos 15 minutos antes de cocinarlo
Si eres de las personas que saca el pollo directamente de la nevera a la sartén, lo estás haciendo mal. Es aconsejable dejarlo reposar, al menos, 15 minutos antes de cocinarlo a temperatura ambiente. De esta manera, la carne se cocinará de una forma más uniforme.
- No lo marees
Cuantas menos vueltas des a la carne de pollo, mejor. Si lo estás cocinando a la plancha, debes fijarte en el cambio de color de la carne. Muchas vueltas sólo conseguirán que el pollo se seque más de la cuenta.
- Adobado, mejor qué mejor
Para no caer en una rutina gastronómica de la que puedas aburrirte, otro consejo para cocinar pollo es adobarla. La carne de pollo admite distintos adobos y marinados, por lo que utiliza las especias que más te gusten, aceite de oliva virgen extra y prepara un adobo. Para que el resultado sea mejor, déjalo en la nevera, al menos, dos horas para que se integren bien los sabores.
- Cocínalo de poco en poco
Otro error muy común es llenar la sartén o la bandeja del horno de piezas de carne de pollo. Es aconsejable dejar espacio entre los trozos para que pueda salir el vapor y se dore sin problema. Si cuando haces pollo frito, te queda como ‘mojado’, ya sabes dónde está el problema.
- Respeta las temperaturas
A diferencia de otras carnes que pueden consumirse poco hechas, el pollo debe cocinarse completamente para que esté perfecto. El centro de la pieza debe alcanzar los 75ºC durante la cocción, pero ten cuidado de no pasarte porque sólo conseguirás que el pollo quede seco e incomestible.
- Déjalo reposar
Cuando termines de cocinarlo, no lo sirvas inmediatamente. Déjalo reposar unos minutos. Esta recomendación también es aplicable al pollo asado, que se recomienda no cortarlo hasta que haya reposado.
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